Comienzos...

Son las 20:20h de un martes raro del temible mes de septiembre para muchos. El calor sigue muy presente y poco hace un triste ventilador encima de una silla. Llevo cerca de 5 horas esperando a que venga alguna musa a visitarme y me dé una solución a esto de empezar un blog en el que vomitar mis pensamientos e inquietudes, y algo que yo creía que sería facil ha pasado a ser el mayor enigma para mi. 

Este podría ser el resumen de todo, acabar aquí este "intento" de blog y seguir mi vida como si nada pero aprendí hace mucho tiempo gracias a la música y a las enseñanzas de la gente sabia que me rodea qe si quieres algo tienes que apechugar, que los comienzos nunca son fáciles y que no hay que rendirse.

Miles de preguntas y dudas pasan por tu cabeza cuando empiezas nuevos proyectos (aunque parezcan ser cosas sin importancia). ¿Cada cuánto tiempo debo actualizar el blog? ¿De qué hablo? ¿Qué pensarán de mí los que me conocen cuando vean esto? 

Y la más inquietante, y además mi favorita... ¿Qué hago para empezar un blog con buen pie?

Esa es la pregunta clave. Pero rápidamente nuestro cerebro deberia generarnos otra del estilo ¿Por qué no ser tu mismo?  

Vivimos en una sociedad en la que es imposible conocer a gente de verdad por preguntas como estas y encima nos preocupamos demasiado por el qué dirán los demás de nosotros. 

Todos hemos mentido alguna vez en nuestra vida acerca de algo por unos motivos o por otros, admitámoslo. Pero una cosa es una "mentirijilla" y otra cosa es convertir tu vida en la de un personaje que ni en las peliculas de Almodovar. Y todo por quedar mejor con la gente, para intentar ser feliz imaginando como sería tu vida. ¿Y al final qué pasa? Que acabas dandote cuenta de que con esa gente puedes parecer feliz pero luego en tu casa, sin esa careta artificial creada por ti mismo, te sientas en el sofá a ver la tele mientras comes una tarrina de helado y te sientes solo, vacío, infeliz...

Es así, la vida es muy puta de por sí como para que nosotros mismos nos pongamos trabas antes de hacer algo por el qué dirán. Cada vez que hacemos esto nos estamos perdiendo sensaciones y estados de ánimo que no hemos sentido nunca. 

Seamos serios. 

Déjate llevar, haz lo que el corazón te pida.

Aceptémonos como somos y entonces conseguiremos ser felices.

Y los (pocos) que leáis esto os preguntareis quien es el pesado que ha soltado esta sarta de paridas. 

No soy más que vosotros. No quiero contar mi vida aquí, si hubiera pretendido eso hubiera empezado así, pero creo que os aburriría mucho. 

Esto tan solo pretende ser el comienzo de algo, guste más o guste menos, y quién sabe si, en el futuro, ayuda a que sea el comienzo de algo mas...

Podéis llamarme Sr. Pesadilla, o Jaac.

Tomen asiento, sírvanse lo que quieran y sean bienvenidos al blog sincero de un saltamontes musical, un aprendiz de la vida!

Comienzos... 

Lo que motivó el comienzo fue que las vidas que presencio no merecen el silencio...